Albert Einstein alguna vez hizo la pregunta: ¿cómo hacer a un niño más inteligente? Su respuesta fue muy corta e increblemente sabia. “Si quieres que tu hijo/hija sea inteligente, léele más cuentos de hadas”, respondió. “si quieres que sea aún más inteligente, léele más cuentos de hadas”. El entendió el valor de la lectura y la narración para los niños. Miremos un poco más a fondo los beneficios de la lectura para los niños.
Los niños tienen un entendimiento estrecho del mundo que los rodea. Esto se debe a la experiencia limitada que tienen. Su percepción subjetiva es limitada por los eventos que se encuentran en su vida cotidiana, basada en las circunstancias en las que crecen y maduran. La lectura de libros le ayudará a tus hijos a expandir esa visión del mundo, y los llevará a ver otros roles y modelos de comportamiento; simular situaciones que difícilmente encontrarán por ellos mismos. Este conocimiento les ayudará a evaluar correctamente situaciones difíciles similares en el futuro, y tambien les dará la oportunidad de desarrollar una personalidad más socialmente adaptable.
Los libros se escriben en una variadad de asuntos y temas, que son considerados para diferentes grupos de edades. Al leer un libro de cualquier tema, los niños/niñas se familiarizan directamente con un amplio rango de asuntos, eventos, problemas, ideas y también les sirve para aprender vocabulario específico. Después de leer un par de buenos libros sobre algunos temas, los niños/niñas estarán felices de adentrarse en el estudio de un tema en particular, dependiendo de los libros que más le interesaron.
¡Un pequeño consejo! Deja que tu hijo decida el tema de los libros. El truco principal es que el niño sea arrastrado por el contenido del libro de tal manera que él o ella no se den cuenta que están adquiriendo nuevos conocimientos en un tema en particular en el proceso de la lectura.
Se ha demostrado que la lectura requiere más capacidad mental y esfuerzo que jugar videojuegos o mirar caricaturas. Muchos padres subestiman la importancia de los libros para los niños. El hecho es que cuando los niños/niñas leen libros, utilizan la parte de sus cerebro que está asociada con las integraciones multisensoriales.. En el proceso de lectura, el cerebro del niño/niña transforma los caracteres alfabéticos para asociar palabras específicas con una visualización de la imagen que generan para llegar a la comprensión. De ésta manera, el niño/la niña entrena su cerebro utilizando pensamiento visual y recolectando pistas contextuales de la narrativa para ayudarles a entender las palabras o frases que aún no son familiares para ellos.
Es importante leer con los niños todos los días. Desde la infancia, la lectura en voz alta forma los primeros fuertes vínculos sociales con sus padres. Por ejemplo, al leer el libro Bacinilla Feliz no sólo ayudará a enserñarle a tu hijo a usar la bacinilla de una manera educativa, sino que te permitirá disfrutar horas de diversión creando un vínculo con tu bebé. Mientras tu hijo/hija crece, puedes continuar leyendole en voz alta y discutir sobre lo que más le gustó del libro
¡Un pequeño consejo! Utiliza la lectura como una oportunidad para relacionarte y comunicarte con tu hijo/hija. Después de la lectura, pregúntale al niño/a la niña a cerca de los nuevos pensamientos y temas cubiertos en el libro, sugiérele aplicar los nuevos conocimientos en su vida diaria.
Aunque los dispositivos electrónicos se han convertido en un fenómeno natural en el Siglo XXI y se han vuelto una parte integral de nuestras vidas, igual que antes, los libros siguen siendo la manera más efectiva de entretenimiento. En lugar de usar video juegos, incentiva a tus hijos a leer. Motivalo con libros para niños llenos de color, ediciones personalizadas, etc. Por ejemplo, el libro Carlos y su equipo Solucionan Problemas no sólo es un cuento interesante sobre la amistad y la asistencia mutua, sino que es a su vez un juego interactivo que fortalece las habilidades adquiridas.
La lectura de libros ayuda a aprender a calmar la mente y el cuerpo para que se puedan concentrar en una tarea en particular durante un cierto periodo de tiempo. El Niño aprende a eliminar las distracciones, abstraerse del ruido con el fin de sumergirse en la lectura y lograr una comprensión completa. Con el tiempo, la atención del niño y su habilidad para concentrarse se incrementará significativamente, lo que dará también un efecto positivo en la habilidad de realizar las tareas escolares. Mejorar el rendimiento académico es uno de los mayores benfecios de la lectura en los niños.
Mientras está leyendo, el niño/niña explora mayor cantidad de nuevos temas con placer. La expansión gradual del vocabulario le permitirá al niño a expresar sus pensamientos más fácil y libremente, así como comunicarse con sus pares. Los comentarios interesantes de las aventuras que lee atraerán la atención de otros niños de manera milagrosa. En el futuro, el creciente talento de la narración le permitirá a tu hijo/hija hacer nuevos amigos y adapatarse más facilmente a la sociedad.
En el proceso de lectura de un libro, el niño/niña memoriza automáticamente el significado de las palabras, las reglas gramaticales, la construcción de oraciones, formando, de esta manera habilidades de escritura y habla. Adicionalmente, la lectura regular entrena la memoria del niño/niña. Entre más serios y complejos sean los libros que lea, mayor vocabulario creará y la memoria mejorará.
La lectura también desarrolla la habilidad de crear relaciones casuales y fantasear. El desarrollo del pensamiento lógico se fortalece especialmente con cuentos de hadas y literatura didáctica, lo que que el niño/niña piense sobre las razones de las buenas y las malas acciones. Historias de fantasia en las que el niño deba imaginar animales no reales o personajes de fantasia ayudará a desarrollar la imaginación del niño.
Aunque puede que esto no parezca como un beneficio importante para un niño/niña pequeño, es recomendable empezar a mostrarle buenos libros al niño/niña desde pequeño para estimular el buen gusto literario como adulto. De esta manera, un hobby útil, una visión del mundo personal, y una actitud moral de los valores es formada en el niño. El amor a la lectura no solo tiene que ver con los libros, es tambien un entendimiento del trabajo titánico que el autor pone en cada uno de ellos. El niño/la niña que ama leer nunca faltará al respeto: tendrá cuidado no sólo del cuidado de los libros, sino de sus útiles escolares.